Oaxaca de Juárez, 2 de marzo. El expresidente brasileño Luis Inácio Lula da Silva, quien cumple una condena por corrupción, pudo abandonar la prisión el sábado para asistir al funeral de su nieto.
Es la primera vez que sale desde su encarcelamiento en abril del año pasado.
Da Silva salió de la cárcel en Curitiba a las 7 de la mañana, voló a Sao Paulo y de allí se trasladó en helicóptero a Sao Bernardo do Campo, donde tenía lugar el funeral.
Los abogados de Lula solicitaron el permiso para asistir al funeral el viernes por la tarde.
Lula purga 12 años de prisión por lavado de dinero y otros hechos de corrupción.
Excélsior