Oaxaca de Juárez, 12 de enero.
El sabio puede cambiar de opinión, el necio nunca.
Sabemos que el presidente López Obrador es un hombre de ideas sólidas. Pero, ayer, dio muestras de sensibilidad y hay que reconocerlo. Dio marcha atrás en dos polémicos temas que le han pegado a su popularidad:
El cierre de ductos para combatir el huachicol, con el consecuente desabasto de gasolinas y diesel en entidades claves del país, y la decisión de otorgar a los militares el mando de la Guardia Nacional.
Aquí aplica la frase atribuida al filósofo alemán Emmanuel Kant: El sabio puede cambiar de opinión, el necio nunca.
Vamos al tema del desabasto. Apenas hace tres días AMLO dijo lo siguiente sobre la costosa estrategia para combatir el robo de combustibles:
“Sería fácil abrir los ductos y decir ‘se normalizó ya la situación’. Pero mantener, a sabiendas, el robo. Es decir: aceptar, tolerar el robo, eso no lo vamos a hacer”.
De esa declaración se colige que no abriría los ductos hasta que se garantice que no habrá robos.
En la mañanera de ayer, sin embargo, el tono fue otro. Dijo que hubo sabotaje, otro, en el ducto Tuxpan-Azcapotzalco.
“Estuvo cargado, empacado y funcionando todo el día. A las once de la noche lo volvieron a romper. Ya se está de nuevo reparando. Me informan que en una hora más se restablece”.
En otras palabras, da a entender que ya lo abrió.
¿Será porque tiene garantizado que no habrá ordeña o es la presión derivada del desabasto de combustibles y el peligro de que se produzca carestía de alimentos en las tiendas y medicinas en las farmacias?
Francamente, dudamos que en cuestión de horas haya encontrado la solución para evitar la ordeña en los ductos.
Me inclino a pensar que ya se dieron cuenta de que fue una metida de pata cerrar precipitadamente esos ductos para evitar el huachicol, sin antes medir el impacto negativo que produciría entre los consumidores.
La drástica medida pudo ser muy rentable para el gobierno de la Cuarta Transformación. Es imperativo ir contra las ratas de combustibles. Pero acabó siendo impopular por las molestias y pérdidas que provocó a ciudadanos, empresas, trabajadores, escolares, amas de casa.
Las palabras textuales que AMLO utilizó en la mañanera de ayer sobre los ductos se completan con lo siguiente:
El gobierno va a dar respuesta al sabotaje. Eso está sucediendo en estos últimos días en el ducto Tuxpan-Aztcapotzalco. Por eso la reducción en el abasto de las gasolinas que está afectando al Estado de México, a la Ciudad de México y a la zona central del país.
Desde ayer y hoy empieza la vigilancia en helicópteros de la Fuerza Aérea en todos los ductos. Se están creando bases especiales en cada determinada distancia.
En el tema del mando de la tan cacareada Guardia Nacional, ya es un hecho que no será militar, como plantea el dictamen original, sino civil.
Así lo dispuso el Presidente. Así lo anunció Alfonso Durazo, secretario de Seguridad Pública, en las audiencias convocadas en la Cámara de Diputados para dialogar sobre el polémico tema.
El argumento para justificar el cambio de postura es que el pueblo manda. ¿Le suena?
Dijo Durazo: “Se han escuchado con el mayor interés los diversos argumentos expuestos por la ciudadanía a lo largo del país y estas audiencias para analizar dicha iniciativa”.
Aclaró que la propuesta de modificación actuará como un marco de referencia constitucional a fin de transitar al diseño de un cuerpo de seguridad pública de carácter, pero con niveles de disciplina, régimen de servicios, ascenso, prestaciones, ingreso, educación, capacitación profesional y disciplina, homologados a los que se aplican actualmente en el ámbito de las fuerzas armadas.
La iniciativa de impulsar una Guardia Nacional partió de reconocer que México presenta una crisis de inseguridad que se ha convertido en una situación de emergencia nacional, puntualizó.
Donde manda capitán: Mario Delgado, coordinador de los diputados de Morena, ya dijo que su grupo asumirá la sugerencia —otrora se llamaba línea—del Ejecutivo y de otras muchas voces, para que la Guardia Nacional tenga mando civil.
AMLO se metió en un tercer tema en su conferencia mañanera. Desmintió las versiones de una inminente detención del líder del STPRM, Carlos Romero Deschamps.
El sesgo que utilizó en poco o nada le ayuda. No faltarán las críticas de que protege a quien tiene señalamientos de corrupción.
Afirmó que el Gobierno Federal no tiene ninguna investigación en contra del mero mero del sindicato petrolero, cuyo estilo de vida corresponde más al de un jeque árabe, que al de un defensor de trabajadores.
Peor. Insinuó que las versiones que corren sobre una inminente captura del sindicalista pudieran ser parte de la campaña derivada del desabasto de gasolinas.
No vamos a actuar si no tenemos elementos, si no tenemos denuncias y pruebas, remató.
Sobre la versión de que Movimiento Ciudadano romperá la alianza con el PAN y el PRD en Puebla y la postulará como candidata a gobernadora de esa entidad, la senadora del MC, Martha Tagle dice que es la primera noticia que tiene.
“Me han estado mencionando, pero en Movimiento Ciudadano ni me hablan desde que competí por la dirigencia”, nos dijo.
Hubo cambios en el gabinete del gobernador panista de Aguascalientes, Martín Orozco.
A la Secretaría de Turismo llega Jorge López Martín, un hombre de trayectoria. Ha sido diputado federal, vocero nacional del azul y representante de ese partido ante el INE.
Queda, al mismo tiempo, como presidente del patronato de la Feria de San Marcos, sin duda la mejor que hay en el país.
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