Oaxaca de Juárez, 17 de noviembre. El viernes 10 de noviembre, se suscitó un evento desagradable al interior del restaurante El Che Gaucho que se ubica en la calle de las Rosas en la colonia Reforma. Mientras los comensales disfrutaban sus alimentos, unos clientes protagonizaron en hecho bochornoso. Resulta que en una mesa se encontraba el ex funcionario Jorge Franco Vargas con otras personas, y en otra, el delegado del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Juan Díaz Pimentel con Héctor Sánchez. De pronto, Pimentel se levantó y dirigió a donde estaba Franco, ahí le empezó a gritar que era un asesino y que se largara de Oaxaca, y para colmo, le tiró un golpe. Esto, ante los comensales que fueron testigos de la agresión. “Alguien” le envió un mensaje al gobernador Alejandro Murat y le informó lo que estaba pasando. Unos minutos más tarde, al lugar llegaron dos personas de seguridad, que detuvieron a Pimentel y se lo llevaron. Héctor Sánchez se trató de disculpar con Franco por este acto vergonzoso. 
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Ya pasó un año de la toma de protesta del gobernador Alejandro Murat y las cosas siguen igual en Oaxaca. El magisterio, los transportistas, las organizaciones sociales, los normalistas siguen movilizándose y afectando a los oaxaqueños que están hartos de estos seres que son dirigidos por líderes corruptos que se embolsan millones de pesos por mantener en jaque a la entidad, en especial a la capital. Los que pueden, ya se han ido de Oaxaca a refugiarse a otros estados, sus hijos estudian en universidades e instituciones privadas e invierten su capital en negocios productivos porque aquí todo está mal y paralizado. Los turistas ya no vienen, tienen temor a ser objetivo de estos rufianes. Pero no todo es malo, algunos personajes se aprovechan y hacen negocios redondos. Ahora, los que tienen aspiraciones a una curul federal tratan de ser palomeados por el number one. En su mayoría son jóvenes que forman parte del equipo del mandatario y que sintieron “bonito” cuando el líder tricolor, Enrique Ochoa Reza declaró que en las próximas elecciones habrá espacio para ellos, para los discapacitados así como para las mujeres.
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El gobernador de Puebla, Antonio Gali habló en Oaxaca sobre el papel que desempeña el oaxaqueño Diódoro Carrasco a quien los poblanos no ven con buenos ojos. Hay muchas quejas sobre su actuación como Secretario General de Gobierno, la situación en el vecino estado se le complica y que tiene su corazón en la entidad donde nació, así de sencillo. Gali sabe que Diódoro es más priista que nada y que no conoce bien el estado, aunque es un compromiso político. Le preguntamos porqué se lo habían llevado allá y nos contestó que tenía experiencia puesto que ya había sido secretario de Gobernación, aunque se le olvidó mencionar que eso fue hace muchos años y que el país ya cambió hasta en la forma de negociar.
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